Yo era ese niño asustado
que temía el reflejo de su espejo
aquel que
se cargo sobre las espaldas
los llantos
las horas muertas
los gritos
los lugares
en los que nadie
le había preguntado
ahora soy
ese hombre
con un niño adentro
encerrado
temeroso
intentando esquivar
las caricias
que le recuerdan
que una vez
estuvo acurrucado.