Si crees que conocer es el camino
deberás estar dispuesto a sentir
vergüenza
a asumir que cada palabra dicha
es un nuevo error en el paladar pegado.
Y que todo es vanidad
hablar de conocer es vanidad
el silencio es vanidad
todo lo que escucharás serán verdades
y al mismo tiempo, obcecación,
irremisible fuerza que separa
las conciencias de la primaria gravidez
del polvo terrestre y frío.
Saber que n unca podrás componer
la historia que tanto anhelas
que se enredan siempre los hilos
que invisiblemente bailan
en tus manos, seguros y firmes.
Buscarás una felicidad más allá del
dolor
y sonreíras llorando unas lágrimas
pétreas y duras
cuando sepas que de nuevo te calzas un
error
no hay felicidad ni hay dolor.
Entenderás esta múltiple ironia
otra vez la vanidad
de creer entender
de creer que escribiendo
entenderás
un consejo
no aceptes consejos
de alguien que cree
que te los puede dar
mucho menos aún
de poetas
que te digan
que te digan
por quien debes
dejarte aconsejar.